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08.02.2012 - 16:12

Escuchas

La intendenta Ana Olivera y el alcalde Gabriel Otero visitaron Nuevo París para atender las problemáticas planteadas por los habitantes del barrio.

Escuchas
 

El lunes 15 de agosto, la intendenta Ana Olivera, el alcalde del Muncipio A, Gabriel Otero y concejales municipales visitaron el asentamiento Guyunusa, en el barrio Nuevo París.
Al llegar las autoridades los vecinos se acercaron y, en ronda, plantearon diversas dificultades que enfrentan en la vida cotidiana. El recorrido comenzó por  Continuación  Faramiñán, una calle de pedregullo con muchos pozos llenos de agua que molestaban al caminar, a causa de las intensas lluvias de días atrás. Calle que, a su vez, es muy transitada por camiones y se estropea con mucha facilidad, lo que hace difícil el pasaje de los peatones, según declararon habitantes de la zona. Por otra parte, varias vecinas plantearon la dificultad que genera a sus hijos/as, las condiciones en las que se encuentra dicho pasaje: "tienen que dar una gran vuelta, caminar cuatro cuadras largas para ir hasta la calle Yugoslavia, y llegar a la escuela y al liceo".
Cristina, vecina del barrio desde 1995, explicó que en Guyunusa, ubicado en un terreno privado, se iba a levantar una calle, que desde hace tiempo estaba aprobado el proyecto para realizarla pero “el dinero nunca apareció”. Cuenta que el dueño de dicho terreno falleció en 1998 y pasó a sucesión. “Hubo un tire y afloje para que quedara en venta, porque la idea es que cada vecino o vecina pueda comprar un espacio y hacerlo colectivo”. El planteo que siempre se le hizo a la Intendencia, según Cristina, fue hacer esa calle y reducir las aguas fluviales, puesto que al no haber cauce natural, cada vez que llueve las casas se inundan. “Había una cañada que fue rellenada por una empresa de la zona que compró el terreno para vertedero de sus desechos; ese terreno está contaminado de cromo que está en el aire”.
Vecinos y vecinas reclaman, desde hace apoximadamente cuatro años, el mejoramiento de la problemática pluvial y de saneamiento, lo que más inconveniente les trae. “Cuando llueve se inunda todo y en algunas casas se forma una piscina”, exclamó Raúl Pérez, uno de los voceros.
Si bien son conscientes de que las obras, para tener una mejor calidad de vida y solucionar los problemas de inundación, son costosas, “cuando se realice el estudio técnico de cómo se puede resolver, en la medida de lo posible, nosotros queremos participar y estamos dispuestos a colaborar en todo lo que podamos, organizarnos y cooperar, y ver si los vecinos y las vecinas podemos estar incluidos”, asintió Pérez.
Franciso Leis, otro vecino de la zona, reclamó por los problemas que genera la basura: “Tiran basura en el medio de la calle, el viento levanta todo y el camión de residuos no pasa, entonces queda en la calle”. Algunas vecinas testimoniaron que “desde hace un año el basurero no trabaja en la zona”.
Susana, que vive hace 14 años allí, mostró en su casa un caminito para entrar, pero que se encuentra rodeado de agua. “Tengo que ponerme botas para caminar entre el barro y al frente de la casa siempre se llena de agua. No estamos pidiendo nada del otro mundo porque, aunque nosotros no viviéramos aquí, la calle la deberían hacer igual”.
Luego de varias horas escuchando y atendiendo a la comunidad de Guyunusa, las autoridades continuaron el recorrido hasta La Suiza y culminaron en una reunión en La Casona ubicada en General Hornos esq. Tampico.
La intendenta se llevó todas las solicitudes para analizar y estudiar, con el compromiso de mejorar las distintas problemáticas en el menor tiempo posible, especialmente la basura y las inundaciones, que son los temas que generan más dificultades, además de mejorar el escaso transporte colectivo que pasa por allí.

Virginia Martínez