Hace trece años el barrio de La Teja salía en los diarios por un tema poco conocido hasta ese momento en nuestro país: la contaminación con plomo en sangre en niños y niñas.
Por el año 2001 en La Teja, zona fabril por excelencia durante fines del siglo XIX y principios del XX, encontrar terrenos con alta concentración de plomo era más que viable y no existían estudios serios hasta el momento sobre la concentración de este metal en el suelo. De todos modos se sabía que la situación se daba desde antes.
Fueron muchos los casos que en su momento tomó la prensa nacional gracias al trabajo y tesón de un grupo de vecinos que investigó y salió a denunciar esta situación, luchando por realojar a los habitantes de estos terrenos contaminados. Ésto se logró, pudiendo mejorar considerablemente las condiciones de vida de estas personas. Igualmente quedaba por resolver un problema que tomaría un poco más de tiempo: ¿qué hacer con esos terrenos contaminados para que otras personas no los ocuparan?
En el caso del terreno de la vieja fábrica Inlasa (Nervión), se demolió toda la construcción, se dio vuelta tierra y se trajo desde otros lugares tierra no contaminada. Hoy existe un proyecto de los vecinos del Barrio Victoria que quieren construir un parque al lado del parque deportivo del Club Universal, que está pronto a inaugurarse, este parque se construyó con dinero de Presupuesto Participativo.
Otro de los terrenos se encontraba en Emilio Romero y Ameghino, en este lugar el terreno fue removido, rellenado con material no contaminado y se construyeron viviendas donde viven algunas familias realojadas.
Por su parte en el terreno del asentamiento Rodolfo Rincón se realizó una remediación de suelo para poder quitar el plomo. En la proa al final de Manuel Herrera y Obes, desde que se realojó el asentamiento para las viviendas “Carlos Pilo” en Ariel y Confederada los vecinos que habían trabajado en el plan de desarrollo local de la Zona 14 habían planteado la necesidad de que se construyera una plaza en ese lugar. Proyecto que permanecía pendiente.
Desde que asumió el gobierno municipal y en el marco del Proyecto Plazas del Municipio, que busca rescatar los espacios públicos volviéndolos espacio de intercambio y convivencia intergeneracional, se definió que era necesario realizar ese espacio público, no solo por la importancia social e histórica que tenia sino también porque esa zona necesitaba de un espacio libre para la convivencia. Sobre esa base fue que se realizó la plaza que contiene juegos para niños, una batería de juegos saludables y un espacio para compartir.
El viernes 13 de diciembre se inauguró el espacio con la presencia de los integrantes del Concejo Municipal, Adriana Rojas Lilian Piña, Nelson Moreira y el alcalde Gabriel Otero. Se contó a su vez con al presencia de la alcaldesa del Municipio D, Sandra Nedod; el presidente la Junta Departamental,
Miguel Velázquez; el edil Dari Mendiondo; y el director de Medio Ambiente de la Intendencia de Montevideo, Juan Canessa.
En la presentación el alcalde Gabriel Otero manifestó la necesidad de que las y los vecinos se adueñen de este espacio, dio gracias a la participación de los vecinos y resaltó la necesidad de que los vecinos se organicen para, por ejemplo, decidir que se va a hacer con parte del terreno de la plaza que esta por verse y se necesita de las y los vecinos para cuidar estos espacios.
El espectáculo artístico estuvo a cargo de varios grupos locales, como los talleres de hip hop del Programa Esquinas de la Cultura, junto a grupos nacionales e internacionales de baile hip hop promocionando el Encuentro Internacional que se realizaba en el Espacio T en esas fechas. La jornada culminó con la actuación de la murga “SQVG”.
* Este viernes estará la Banda sinfónica de Montevideo en la plaza a partir de la 21 horas.
* Los jueves de febrero y marzo a las 19 horas, habrá un taller abierto de hip hop del Programa Esquinas de la Cultura.
Pablo Khalil