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27.06.2014 - 17:53

Del barrio a la piscina

En el Municipio a, a través de los CCZ18 y CCZ14, se llevan adelante clases de natación gratuitas para niños y adolescentes de los barrios del oeste montevideano.

En el Municipio a, a través de los CCZ18 y CCZ14, se llevan adelante clases de natación gratuitas para niños y adolescentes de los barrios del Oeste montevideano. Estas clases son dictadas por los profesores Guillermo Nantes (CCZ18) y Estela Eiroa (CCZ14) en la piscina de la plaza de deportes Nº7 de Paso Molino (Avda. Agraciada 4956).

Allí fuimos para conocer más sobre este proyecto y charlar con los profesores y sus alumnos.

Son las 17 hs y vamos llegando. Una vez dentro del complejo se hace notar el cambio de temperatura, acorde para la práctica de la natación. Desde la recepción hasta la piscina está climatizado. Además de la climatización el complejo cuenta con vestuarios, duchas y baños con todas las comodidades, que según nos cuenta el Profe. Guillermo son las ideales para la natación, “esta piscina no tiene nada que envidiarle a muchas piscinas privadas, y en muchos casos las supera en cuanto a su infraestructura y recursos”.

Poco a poco van llegando los “chiquilines” del primer grupo y el profesor pasa la lista. Andrés (alumno) nos cuenta que es su primera vez en clases de natación y dice estar muy contento de poder participar.
Son más de 60 los alumnos que concurren a estas clases desde diferentes barrios. La convocatoria para la formación de los grupos se realizó a través de los comunales y se logró que todos los inscriptos pudieran formar parte de las clases. Se formaron dos grupos, de acuerdo a las edades, que concurren dos veces por semana.

La clase tienen una duración de una hora aproximadamente en donde se practican técnicas de natación y se les da un rato de piscina “libre”, todo bajo la atenta mirada de los padres de los alumnos, que observan por las ventanas de la piscina acompañados de sus mates.

Para muchos de ellos es su primera experiencia en una piscina, como nos cuenta Mario de Paso Molino, “ésta es la primera vez que hago natación, nunca había entrado en una piscina, aprendo a nadar y al mismo tiempo me divierto con los compañeros”.

Además del objetivo del aprendizaje de las técnicas de natación, Guillermo nos cuenta que estas clases tienen también el objetivo de la socialización e integración, “hay chiquilines que tiene muy pocas oportunidades, no solo de conocer y hacer uso de una piscina con esta infraestructura, sino también de salir del barrio, integrarse y socializar con chicos de otras zonas”

Finalizada la clase los alumnos van a los vestuarios. Una vez fuera salen con sus caras alegres y cansadas, “me encanta venir a la piscina, me canso pero divierto, ya aprendí a nadar y tengo amigos nuevos” nos comenta Miguel (alumno).

Como vemos, varios son los motivos por los que vale destacar esta buena iniciativa que llevan adelante los profesores con apoyo de los comunales, que tiene como objetivos además de la práctica de la natación, la integración y la socialización de los niños de diferentes barrios del Oeste montevideano.

Juan Lemes