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09.01.2015 - 14:33

Uruguay Trabajó

Finalizó en el mes de Diciembre otra temporada del programa “Uruguay Trabaja”. La ultima labor se realizó en la plaza Dr. Domingo Prat.

Realizando las últimas tareas, se vio a los participantes de este proyecto trabajando en conjunto y demostrando un espíritu de conformidad ante lo logrado.
Fue un momento emotivo ya que para todos los que integran este equipo, tanto los trabajadores como los capacitadores, “Uruguay Trabaja” representa grandes oportunidades, nuevas experiencias y en algunos casos un cambio de vida. Dicha labor contó con el apoyo del Área Urbanística del Centro Comunal Zonal 14 que también se encontraba presente en esta ocasión.

 

Este es un programa ejecutado por el Ministerio de Desarrollo Social, que brinda la posibilidad de realizar tareas de valor comunitario por un período de hasta 8 meses, percibiendo un subsidio denominado "Apoyo a la Inserción Laboral".
El objetivo principal es lograr la inserción laboral de desocupados de larga duración, pertenecientes a hogares de bajos recursos.

La posibilidad se brinda a todas las personas, mayores de 18 y menores de 65 años de edad, en situación de vulnerabilidad socio-económica, con ciclo básico incompleto, y que estén desocupadas hace más de dos años
Los participantes desarrollarán actividades formativas y operativas por un total de 30 horas semanales. Las tareas a desarrollar están destinadas a mejorar y recuperar las instituciones valoradas por la comunidad.
Los trabajos son supervisados por las Organizaciones Sociales y los Organismos Públicos que selecciona el Ministerio, responsables asimismo de la implementación del programa de formación.
Para conocer un poco mas a fondo este programa y las obras de la plaza, conversamos con los referentes operativos Mario Albarracin, Ariadna Ibaul, el Arquitecto Héctor Pola y Virginia, una de las integrantes de la cuadrilla, que compartieron sus experiencias con nosotros.

Mario y Ariadna que están a cargo de la cuadrilla nos comentaron lo siguiente:
“En primer lugar, nuestra labor labor es educar en todos los aspectos laborales.
En estos grupos, se encuentran personas que no han tenido la oportunidad de un trabajo formal, por lo que no tienen en claro lo que es cumplir con un horario, ni cuales son sus derechos y obligaciones, de ese modo es importante el seguimiento y la constancia para que ellos puedan salir de esta experiencia con la formación para poder integrarse a cualquier trabajo.

Ambos hace diez años estamos trabajando en esto, y es muy buena la experiencia que te deja. Nosotros aprendemos muchísimo de la gente y eso es lo que nos sirve para, el año siguiente, reanudar y poder llevar adelante de mejor manera los proyectos que se presenten.
La idea es generar en ellos los hábitos de trabajo, que sean responsables, que tengan actitud, que puedan sacar el carné de salud, que estén en regla como para poder seguir adelante.

En estos años se han visto muchos cambios, personas que han podido seguir con un proyecto de vida. Hay mucho potencial, tal vez “dormido” por una situación social, pero realmente lo hay y a veces nos asombramos. De todos modos los procesos son diferentes, en algunos casos a lo último del convenio recién estén demostrando un perfil, hacia donde pueden ir y que podrían estudiar, y por otro lado hay personas que ya al primer o segundo mes están mostrando un potencial importante y es bueno motivarlos para que sigan estudiando y capacitándose, que terminen la escuela, eso es lo principal.

La verdad que esto en un aprender día a día, totalmente enriquecedor para ellos, para nosotros y para el entorno también, los vecinos que empiezan a demostrar respeto por la gente de “Uruguay Trabaja” , y es bueno también el intercambio con el comunal.
Este año hemos tenido una experiencia que no habíamos tenido, este año entraron personas transexuales y otras  con discapacidades motrices e intelectuales y la verdad nos sentimos orgullosos de el resultado que nos dieron estos grupos. Los compañeros los aceptaron enseguida, todo eso te dice que estamos haciendo las cosas bien.

Muchas veces se piensa que una persona a la que le falta una pierna no puede hacer nada, y uno acá ve que el muchacho se apoyaba en la muleta con una mano y con la otra usaba la pala par hacer pedregullo.
Este era un año complicado justamente por eso, y ahora que tuvimos la experiencia podemos decir que se puede, y esta bueno que la gente lo sienta así.”

El arquitecto Héctor Pola, docente de UTU, trabaja como tallerista de albañilería y compartió su experiencia.
“Nosotros hacemos un trabajo teórico en ACJ y la mayor carga horaria es por ejemplo en plazas como esta.
Básicamente mi tarea es ayudar a que entiendan los procesos constructivos y después acá sobre la marcha ir  corrigiendo el procedimiento en si, lo que es el nivel la linea, las proporciones de  materiales, lo que es levantar un murete entre otras cosas. La verdad es que se avanza bastante y ellos se llevan cosas de esta experiencia.

Yo a veces digo, tal vez no salgan de acá a trabajar en la construcción, pero capaz que mañana tienen que levantar un muro en su casa para mejorar su condición de vida y saben como hacerlo, o tienen que pintar y lo pueden hacer, y antes de entrar, muchos no tenían idea de como empezar.
Mas allá de la experiencia laboral les queda algo para la vida diaria, por ejemplo para mejorar sus hogares. Y eso es lo que yo veo mas interesante, la posibilidad de mejorar su entorno.

Acá se hizo toda la caminería, salvo el murete y el banco, todo lo de demás de hizo nuevo.
Antes la gente saltaba la cuneta para ingresar ala plaza y ahora ya tienen como hacerlo, se hicieron juegos para los niños. Lo bueno es que la gente ya se esta apropiando de esto.
Un profesional que no visita la zona por otro motivo no tiene ni idea de la realidad de la zona, ni de las necesidades o carencias de la gente.”

Virginia, una de las trabajadoras del proyecto nos contó lo siguiente:
“Me enteré en el barrio que en el merendero Sonrisas se anotaban para concursar. Probé suerte y quede, me gusto la idea de que sean pocas horas porque yo tengo tres nenes.
En la plaza hicimos 9 banquitos de ladrillo, pusimos caños en la sanja, pusimos material e hicimos la caminería.
Para mi esto significó mucho porque hacía 8 años que no trabajaba formalmente, estuvo muy buena la experiencia, compartís cosas y aprendés con los referentes.”

Maximiliano Montanari